4ª Jornada Liga Municipal 2011-2012

Se torció la cosa



El Devesa perdió el pasado sábado un encuentro que en principio debería perder puesto que el rival en estos momentos es líder de la liga, pero lo hizo de forma escandalosa e incomprensible. El marcador de 11-1 refleja lo que sucedió en el campo, un primer tiempo bastante decente (1-1), y unos segundos 45 minutos llenos de desgracias y falta de concentración que hicieron que los minutos finales se pareciesen a todo menos a un partido de fútbol.

El equipo comenzó bastante bien, aunque llegaba poco al área rival dado que Kevin y Wilson no fueron titulares dado que llegaron con el choque empezado. Bastante serios atrás el gol del rival llegó en un riguroso penalti que Said cometió a los pocos minutos. Con el paso de los minutos el equipo ganó confianza y a la media hora y con los dos cambios de los delanteros el equipo acabó esta primera parte achuchando a su rival y empató gracias a un regalo de la defensa del Itama que dejó franco el balón al borde del área en un pase horizontal que Kevin interceptó para lograr el 1-1. En esos diez últimos minutos del primer acto el Devesa tuvo 3 o 4 claras ocasiones para haberse puesto por delante.

El segundo tiempo fue otra pelicula. Está comprobado que al equipo le sientan fatal los intermedios. Falta de concentración y bajada general de brazos cuando el rival se adelanto por dos veces en el luminoso. A pesar de todo con el 4-1 el equipo dispuso de una pena máxima cometida sobre Kevin que Miguel falló estrepitosamente. Hubiese sido el 4-2 y el Devesa se hubiera podido meter de nuevo en el encuentro.

A partir de este momento fue cuando empezaron las desgracias. Gustavo, que hasta ese momento había realizado un gran partido bajo palos por ausencia del portero titular y lesión del segundo guardameta, se lesionó y el equipo tuvo que recomponerse. Richard con una muñeca lesionada ocupó la meta, pero su aportación bajo palos fue escasa dado que sufrió también una lesión a los pocos minutos y tuvo que ser sustituido por Said, que de esa forma recordaba sus tiempos de portero en temporadas pasadas. El equipo tuvo que terminar el choque con un jugador menos y habiendo pasado bajo palos nada menos que tres integrantes del equipo.

De todas formas a pesar de lo abultado del marcador y de las pequeñas tensiones que hubo durante los minutos finales entre unos y otros el rato mereció la pena por la jugada del partido. Magín cometió una falta que le pitaron en contra. El rival colocó el balón y cuando pitó el de negro el gallego sacó la misma alegando que si se adelantaba al rival era legal. Nadie sabe que le pasó por la cabeza a nuestro lateral, pero ver la cara de asombro del árbitro era todo un poema.